Beneficios de consumir productos congelados

Consumir alimentos congelados se ha convertido en una práctica habitual en nuestros hogares, aunque aún hay familias que recelan. Congelar se ha convertido en la técnica de conservación más usada y efectiva actualmente, aquí te explicamos por qué.

  • Mayor seguridad e higiene

Las bajas temperaturas matan muchos microorganismos, bacterias y parásitos como el anisakis, el cual es muy peligroso y bastante común en los pescados, además detienen el proceso natural de degradación de los alimentos, lo que permite preservarlos.

  • Mayor frescura

Un correcto suministro de temperatura controlada garantiza al consumidor que el producto conserva todas sus cualidades.

Gracias a la frescura que podemos percibir en los alimentos tras su descongelación podemos comprobar que la cadena de frío se ha mantenido en todo momento

¿Cómo saber si se ha cumplido la cadena de frío?

Podemos utilizar todos nuestros sentidos para comprobarlo, de esta manera observaremos si conserva su color, olor, sabor, apariencia y textura.

  • Te permite tener alimentos de temporada todo el año

Puedes disponer de alimentos congelados incluso cuando no es su temporada.

La congelación inmediata de un alimento tras su recolección o captura impide que empiece a degradarse, garantizando, además la ausencia de parásitos.

También te permite ahorrar, ya que puedes comprar productos de temporada o productos en oferta a buen precio y almacenarlos para cuando los necesites.

  • Comodidad, son fáciles de almacenar y vienen preparados para ser cocinados o calentados

Ahorrarás 𝐭𝐢𝐞𝐦𝐩𝐨, 𝐞𝐬𝐟𝐮𝐞𝐫𝐳𝐨 𝐲 𝐝𝐢𝐧𝐞𝐫𝐨 en la cocina, ya que la mayoría de los productos congelados vienen listos para consumir, tan solo habrá que hacer el proceso de descongelación adecuadamente y dependiendo del producto calentar o cocinar.

Ideal para esos días que bien por falta de tiempo o de ganas no nos apetece estar demasiado en la cocina.

Recomendaciones para comprar productos congelados

  • Comprar siempre envases que estén limpios y sin roturas.
  • Observar bien los paquetes: si tienen escarcha o si al presionar con los dedos y notas blando o bloques apelmazados, indica que en algún momento se ha roto la cadena de frío.
  • Comprobar que el producto está bien etiquetado y que muestra el peso, fecha de congelación y de caducidad o consumo preferente así como normas de almacenamiento y preparación.
  • Hay que procurar que estos comestibles sean los últimos en ser adquiridos durante sus compras en el supermercado, para que permanezcan el menor tiempo posible a temperatura ambiente, otra alternativa y muy recomendable es utilizar una bolsa isotérmica mientras se está haciendo la compra.

Si quieres aprender más sobre cómo colocarlo en tu congelador, te dejamos la recomendación del ministerio de Sanidad aquí

¡Esperamos que después de este artículo le pierdas el miedo a comer alimentos congelados y apuestes por ellos en cualquier época del año! Nosotros seguiremos repartiéndolos por Extremadura y Andalucía, si aún no llegamos a tu tienda, restaurante o catering, llámanos!

Frioal, distribución de productos congelados